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佈道

Tema 6: Herejía

[6-1] Seudos y Herejes dentro de la Cristiandad (Isaías 28:13-14)

Seudos y Herejes dentro de la Cristiandad (Isaías 28:13-14)
“La palabra, pues, de Jehová les será mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; hasta que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, enlazados y presos. Por tanto, varones burladores que gobernáis a este pueblo que está en Jerusalén, oíd la palabra de Jehová.”
 
 
LA HEREJÍA BÍBLICA
 
¿Cómo define la Biblia la palabra “hereje?”
La Biblia define al hereje, como aquél que tiene pecado en su corazón no obstante, de creer en Jesús.
 
Hay muchos seudo periodistas en estos días, sobre todo en los países en vías de desarrollo. Ellos aunque pretenden ser periodistas, mas bien acostumbran arrancar el dinero de sus víctimas, amenazando con exponer algo que sus víctimas hayan hecho. Seudo, significa algo que parece genuino pero que en realidad no lo es. En otros términos, se refiere a algo que por fuera es completamente diferente lo que es por dentro.
Las palabras “hereje” y “seudo” se usan bastante a menudo, sobre todo en las iglesias cristianas.
Pero hay pocas definiciones claras de lo que es un hereje y lo que es ser llamado “seudo,” no hay muchos que enseñan estos conceptos en estricto acuerdo con la Biblia.
Bajo estas circunstancias, yo siento en el límite del deber para describir lo que la Biblia define “herejía” y verter alguna luz en el asunto. También quiero señalar algunos ejemplos de herejía en la vida real y que esto nos haga pensar juntos sobre ello. Cualquiera que cree en Dios tiene que pensar por lo menos una vez sobre la herejía en sus vidas.
Tito 3:10-11 define a un hereje como una persona que causa división, que es pervertida y pecadora, condenándose a sí misma. Un hereje es alguien que se condena a sí mismo como un pecador. Por consiguiente ésos que creen en Jesús pero tienen el pecado en sus corazones son herejes ante Dios.
Jesús quitó todos los pecados a través de su bautismo. Pero los herejes se niegan a creer en el verdadero evangelio que trae la salvación a los pecadores y así se condena para unirse a la línea de los pecadores.
¿Eres tú un hereje? Nosotros tenemos que pensar sobre esto si queremos vivir una vida llena de fe.
¿No estás tú condenándote como un pecador aunque creas en Jesús si es que tú no has oído del evangelio del agua y el Espíritu todavía? Si tú te consideras un pecador, entonces tú estás haciendo un perjuicio a Jesús despreciando su salvación perfecta y el evangelio del agua y el Espíritu.
Llamarse a sí mismo pecador ante Dios es admitir que uno no es hijo de Dios. Aquéllos que confiesan a Jesús, “Señor, yo soy un pecador,” tienen que reconsiderar su propia fe.
¿Cómo puedes creer en Jesús y seguir clamando ser un pecador cuándo Jesús quitó todos los pecados del mundo y te salvó perfectamente de la condenación eterna? ¿Cómo puedes negar su regalo de salvación, definirte a ti mismo como un pecador cuándo Jesús quitó todos tus pecados a través de su bautismo y por ellos fue juzgado en la cruz?
Tales personas son herejes porque ellos voluntariamente son pecadores apartándose de la palabra de Dios. Tú tienes que conocer el evangelio del agua y el Espíritu para evitar cometer herejía delante de Dios.
Cualquiera que cree en Jesús pero que no nace de nuevo es un hereje porque todavía tiene el pecado en su corazón.
Porque Dios quitó todos los pecados del mundo que incluyen los nuestros, nosotros somos herejes ante Dios si ignoramos esta bendición de salvación. Porque Dios es santo, nosotros somos herejes si tenemos pecado en nuestros corazones. Si nosotros realmente queremos llegar a ser justos, nosotros tenemos que creer en el evangelio del bautismo de Jesús y su sangre en la cruz.
 
 
EL ORIGEN DE LA HEREJÍA EN LA BIBLIA
 
¿Cuál es la cualidad más importante para un sacerdote?
Que él tiene que nacer de nuevo.
 
Veamos 1 Reyes 12:25-26. “Entonces reedificó Jeroboam a Siquem en el monte de Efraín, y habitó en ella; y saliendo de allí, reedificó a Penuel. Y dijo Jeroboam en su corazón: Ahora se volverá el reino a la casa de David.’” Jeroboam era uno de los subordinados de Salomón. Cuando Salomón se corrompió en sus últimos años, Jeroboam se rebeló contra el rey, y después él se volvió el rey de las diez tribus de Israel por el tiempo de Roboam, el hijo de Salomón.
La primera preocupación de Jeroboam cuando él se volvió el rey de Israel era que su pueblo podría volver a Judá, al lugar donde estaba el templo.
Así que, él se propuso una idea para impedir que esto pasara. Él hizo dos terneros dorados en Bet-el y Dan y le ordenó a su pueblo que se les rindiera culto. 1 Reyes 12:28 dicen, “Y habiendo tenido consejo, hizo el rey dos becerros de oro.” Uno que puso en Bet-el, y el otro en Dan y les dijo a su pueblo que les rindieran culto, a pesar de que haciendo esto estaban cometiendo un pecado terrible. Él arbitrariamente designó sacerdotes para dirigir el culto.
“Con todo esto, no se apartó Jeroboam de su mal camino, sino que volvió a hacer sacerdotes de los lugares altos de entre el pueblo, y a quien quería lo consagraba para que fuese de los sacerdotes de los lugares altos” (1 Reyes 13:33). Ése es el origen de la herejía.
Aun ahora, los herejes conceden el sacerdocio a cualquiera que se ofrece para hacer el trabajo de Dios. Cualquiera que se gradúa de un seminario teológico puede volverse un ministro, un evangelista, un misionero y más, aun cuando él no haya nacido de nuevo del agua y del Espíritu.
¿Cómo puede alguien que no ha nacido de nuevo llegar a ser un ministro? Si una persona es designada como sacerdote, la iglesia que lo elige se convierte en una fábrica de producción de herejes.
Pensemos de nuevo sobre el origen de la herejía. Primero, Jeroboam sustituyó los terneros dorados por Dios para mantener su poder político. Segundo, él consagró a cualquiera que se ofreció para hacerse sacerdote. En otros términos, él consagró a personas ordinarias como sacerdotes. Y la misma cosa se hace estos días.
La historia de la herejía continuó del mismo modo después del tiempo de Jeroboam. A aquéllos que no nacen de nuevo de agua y del Espíritu nunca debe permitírseles el hacerse sacerdotes.
¿Puede cualquiera que sólo se ha graduado de un seminario teológico ser un ministro o un evangelista? ¿Está bien para ellos servir a Dios a pesar del hecho de que no han sido aceptados por Dios? Nunca. Sólo a aquéllos que han sido reconocidos por Dios se les debe permitir hacerse sus siervos. Ésos que son reconocidos por Dios son aquéllos que nacen de nuevo de agua y del Espíritu.
Se registra en 1 Reyes 12:25-26 y 1 Reyes capítulo 13 que el pecado de Jeroboam provocó la ira de Dios. Todos deberíamos conocer esta historia, y si a alguien no le es familiar, debe regresar a la Biblia y averiguar.
Piensa de nuevo si tú estás sustituyendo los terneros dorados por Dios en tu ministerio. ¿En cualquier oportunidad, pones énfasis en las bendiciones terrenales para que tus seguidores no puedan volver al evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu?
¿Tú les dices a tus seguidores que ellos pueden curarse de la enfermedad si ellos creen en Jesús? ¿Tú les dices que ellos serán bendecidos en sus propiedades? ¿Tú propones a aquéllos que no son nacidos de nuevo para ser ministros o parte del staff de la membresía de tu iglesia y clamas que tu denominación es la única ortodoxa? Entonces tú estás cometiendo el pecado de Jeroboam ante Dios y provocando su ira.
 
 

LOS HEREJES LE RINDEN CULTO AL DIOS DE LOS CARNEROS DE ORO

 
Incluso hoy, hay muchos herejes que rinden culto a los carneros de oro. Ellos dicen que Dios bendijo a Salomón cuando él ofreció mil ofrendas quemadas a Dios.1 Reyes 3:3-5 dice, “Mas Salomón amó a Jehová, andando en los estatutos de su padre David; solamente sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos. E iba el rey a Gabaón, porque aquél era el lugar alto principal, y sacrificaba allí; mil holocaustos sacrificaba Salomón sobre aquel altar. Y se le apareció Jehová a Salomón en Gabaón una noche en sueños, y le dijo Dios: Pide lo que quieras que yo te dé.’”
Ellos estafan dinero a sus seguidores bajo la promesa fraudulenta de “las mil ofrendas quemadas de Salomón.” A esos tontos seguidores les roban su dinero. Y aquéllos que rinden culto a los carneros de oro como su dios se privan de su dinero, mismo que se usa como contribución para construir los tremendos edificios de la iglesia. No es porque sus iglesias sean demasiado pequeñas, sino porque ellos le quieren arrancar el dinero de sus seguidores.
Poner los carneros de oro en sus congregaciones para rendirles culto era sólo la excusa de los herejes para arrancarles el dinero a sus seguidores. Nosotros, los que creemos en Dios nunca se nos debe tomar como tontos. Si tú ofreces tu dinero en el culto de los carneros de oro, no lo ofreces a Dios, sino que termina en los bolsillos de falsos sacerdotes que están llenos de codicia como Jeroboam. Tú nunca deberías caer en las trampas de tales herejes.
¿Entonces por qué Dios se agradó con las mil ofrendas quemadas de Salomón? Porque Salomón conocía sus propios pecados, reconoció que él tenía que morir por ellos y ofreció los sacrificios de acuerdo con la fe. Él ofreció mil ofrendas quemadas en gratitud por la salvación de Dios. Salomón ofreció mil ofrendas quemadas cada día, pensando en la redención del agua y del Espíritu.
Ahora, tú debes recordar el verdadero significado de la herejía para que nunca seas engañado por los falsos sacerdotes.
 
 

ESOS QUE MINISTRAN SIN HABER NACIDO DE NUEVO SON HEREJES

 
¿Qué es lo que dicen los herejes acerca del nuevo nacimiento?
Ellos dicen que han nacido de nuevo por visiones, sueños, y varios tipos de experiencias espirituales
 
Existen aquéllos que enseñan a otros el nuevo nacimiento cuando ellos mismos no han renacido en la fe. Ellos son todos unos herejes. Ellos hablan a otros del nuevo nacimiento cuando ellos son incapaces de renacer porque ellos no conocen sobre el evangelio del agua y del Espíritu. Nosotros sólo podemos reír.
Los falsos sacerdotes predican un evangelio falso, torciendo el evangelio del agua y del Espíritu. Ellos les dicen a las personas que laven sus propios pecados cada día.
Ellos dicen, “Ve y ora en las montañas, ayuna, conságrate a ti mismo al trabajo de Dios, ora al romper el alba, sé obediente, ofrenda mucho dinero para construir iglesias, pero tú debes cuidar de tus propios pecados.”
Una vez, yo oí a alguien testificando que él nació de nuevo. Él dijo que en un sueño, él estaba de pie en una línea y cuando él dio un giro, Jesús le llamó por su nombre. Él dijo que ese era el testimonio de su nuevo nacimiento. ¿Pero su convicción es correcta? Jesús no dijo eso.
En Juan 3, Él dice, “A menos que uno naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.” Dios dice que sólo aquéllos que nacen de nuevo de agua y del Espíritu pueden llegar a ser verdaderos sacerdotes. Cualquiera que cree que nace de sueños, fantasías, éxtasis espirituales, u oraciones de arrepentimiento es un hereje.
Estos días muchas personas no creen en la palabra escrita de Dios y levantan sus doctrinas sectarias en lugar del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu. Ésos que se niegan a predicar el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu son seudo-cristianos y herejes. 
 
 
REFORMADORES Y LA CRISTIANDAD EXISTENTE
 
¿Cuándo el verdadero evangelio se mezcló y fue distorsionado por otras religiones?
Desde que Constantino el Emperador Romano proclamó el Edicto de Milán en el 313 A.C.
 
¿Cuándo se formaron las denominaciones cristianas? ¿Cuándo empezaron las diferentes denominaciones como la Presbiteriana, Metodista, Bautista, Luterana, la Santidad, y el Evangelio Completo? La Reforma fue hace sólo 500 años aproximadamente.
Los primeros cristianos fueron aquéllos que siguieron a Jesús cuando él estuvo en este mundo. “Cristianos” significa “aquellos que siguen a Cristo.”
Los primeros cristianos fueron los apóstoles y sus discípulos. Los apóstoles y los padres de la iglesia siguieron el verdadero evangelio hasta el 313 D.C. Pero después del Decreto de Milán de Constantino el Grande, los cristianos y los gentiles se empezaron a mezclar, produciendo un oscurantismo que duró más de 1000 años. 
Después, a principios del siglo 16, Martín Lutero proclamó la Reforma, diciendo, “Más el justo vivirá por fe.” Poco después, entre 1500∼1600, Reformadores como Juan Calvino y Juan Knox guiaron el movimiento fuera del catolicismo. Esto fue todo lo que la Reforma logró.
La Reforma simplemente fue un esfuerzo para establecer nuevas iglesias separadas de la Iglesia Católica Romana. Los reformadores no negaron el catolicismo en sí.
Su propósito no fue promover la fe del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu, sino librarse de la opresión y corrupción de la Iglesia Católica Romana. La Iglesia Católica Romana llamó a este movimiento “Protestantismo.” Esto significa “los protestantes.”
En ese tiempo, la Iglesia Católica Romana instó a las personas a comprar Indulgencias, diciéndoles que ellos podrían enviar a sus antepasados muertos al cielo cuando compraran indulgencias con gran suma de dinero. Lutero no comprendió que el catolicismo estaba equivocado. Él sólo estaba intentando que la Iglesia Católica Romana se abstuviera de vender Indulgencias para financiar la construcción de la Catedral de San Pedro.
Como resultado, podemos ver muchos remanentes de la Iglesia Católica en las iglesias protestantes modernas: el bautismo infantil, las oraciones de arrepentimiento de forma similar a la confesión en la Iglesia Católica Romana, los santos rituales, reconocimiento como ministros sólo a aquéllos que se gradúan de los seminarios teológicos, majestuosas y grandiosas iglesias. Todo esto son los remanentes de la Iglesia Católica Romana.
Contando desde la Reforma a principios de los 1500’s, la historia del Protestantismo sólo tiene 500 años aproximadamente. Este año es el 481 aniversario de la Reforma. Puede ser que tú no comprendas que Martín Lutero protestó hace tan sólo 481 años contra su iglesia madre. El Protestantismo no puede ponerse a clamar así legitimidad comparativamente a la luz de su juventud. La reforma del cristianismo todavía sigue. Y debería seguir continuamente.
Pero hay una cosa que nosotros debemos tener presente. Nosotros nunca debemos olvidar que sólo aquéllos que nacen de nuevo de agua y del Espíritu pueden entrar en el reino del cielo. ¡Y prediquemos esto! ¿Tú predicas el evangelio de Jesús, el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu? Si no, tú no eres un siervo de Dios. Es en el evangelio del “nuevo nacimiento de agua y del Espíritu” el Dios quiere que nosotros creamos. Es lo que Jesús le enseñó a Nicodemo en Juan capítulo 3.
¿La Biblia habla únicamente sobre el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu, o habla sobre otras cosas como trabajar para el bien de la sociedad y el vivir una vida santa? Claro que esto último también es importante. Pero tu puedes hacer eso después de que hayas nacido de nuevo de agua y del Espíritu. La voluntad de Dios para nosotros es que creamos en el evangelio.
 
 
LAS ENSEÑANZAS DE LOS HEREJES
 
¿Quién es hereje?
Aquél que sigue siendo un pecador no obstante que cree en Jesús
 
¿Cuándo empezó a prosperar en el mundo la fe herética seudo cristiana?
El pueblo de Israel adoró un sólo Dios hasta que fueron separados en dos reinos en el tiempo de Jeroboam como está escrito en 1 Reyes capítulo 12-13. Desde aquel tiempo, antes de que Cristo viniera a este mundo, la fe herética empezó a prosperar. Y hay muchos herejes en estos días.
La Biblia habla sobre sus enseñanzas seudo cristianas en Isaías capítulo 28 y Tito 3:10-11. La Biblia dice que los herejes son aquéllos que creen en Jesús pero que todavía tienen el pecado en sus corazones. Cualquiera que está en esta condición es un hereje.
Y ellos enseñan, como está escrito en Isaías 28:9-10, “¿A quién se enseñará ciencia, o a quién se hará entender doctrina? ¿A los destetados? ¿A los arrancados de los pechos? Porque mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá.”
Los herejes agregan mandato sobre mandato, renglón sobre renglón. ¿Esto qué significa? Significa “Tenga cuidado, tenga cuidado, tenga cuidado de aquéllos que dicen que ellos han nacido de nuevo a través de su fe en Jesús.” Ellos apenas le dicen que tenga cuidado no importa de que. Ellos le dicen que no escuche, que no vaya, para que pueda caer en la herejía.
¿Pero si ellos están tan seguros que lo suyo es la fe ortodoxa, por qué no pueden ellos rechazar a aquéllos que dicen que sus creencias difieren de la palabra de Dios? Es una lástima. Ellos claman ser los cristianos verdaderos, pero ellos no tienen las palabras para superar lo que ellos llaman herejía. Los verdaderos cristianos pueden triunfar sobre cualquier hereje con la palabra de Dios.
Estos días, podría haber cristianos ortodoxos que denuncien al que ha nacido de nuevo como “hereje” sólo porque sus creencias son diferentes. ¿Cómo podemos ser herejes cuándo nosotros creemos en el evangelio del agua y del Espíritu?
Si los llamados herejes predican el evangelio del agua y del Espíritu, ellos son los verdaderos cristianos ortodoxos. Igualmente, si hubiera cristianos ortodoxos que no predicaran el evangelio del agua y del Espíritu, entonces serían herejes.
La diferencia entre “la ortodoxia” y “la herejía”, las mentiras sobre si ellos predican el evangelio del agua y del Espíritu y si ellos creen en Jesús y tienen el pecado en sus corazones o no. ¿Cómo pueden ellos ser herejes si ellos creen en la palabra de Dios y nacen de nuevo de agua y del Espíritu?
¿Es herejía creer en el bautismo de Jesús y su sangre en la cruz y ser completamente limpió del pecado? ¿Es “ortodoxo” no creer en el evangelio del agua y del Espíritu?
Hay tantos denominalistas que se han salido fuera de la Biblia y todavía claman ser cristianos “verdaderos.” Ellos se han salido del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu como lo ha especificado la Biblia porque ellos predican sólo la sangre en la cruz, negando el bautismo de Jesús (el agua).
¿Cuál es la diferencia entre la Iglesia Católica Romana y la Iglesia protestante en estos días? Así como los reformadores se rebelaron contra la Iglesia Católica Romana, así como ellos salieron de la Iglesia Católica Romana y construyeron el Protestantismo, así nosotros también debemos rebelarnos contra cristianos ciegos y falsos sacerdotes. Sólo entonces nosotros podemos abrir nuestros ojos al verdadero evangelio, tener la verdadera fe, y ser completamente salvados a través del evangelio del agua y del Espíritu.
 
¿Qué debemos hacer para evitar ser herejes?
Tenemos que nacer de Nuevo del agua y del Espíritu
 
La Biblia nos dice que sólo aquellos que creen en el evangelio del bautismo de Jesús y su sangre en la cruz siguen la verdadera fe. Jesús lo dijo así habando de Nicodemo en Juan 3:1-12.
Los herejes siempre instan a sus seguidores a que sean devotos en su fe. Ellos les instan a orar al romper el alba y trabajar más duramente. Es como instar al hombre ciego para que corra.
No importa cuán duro tú ores, es inútil si tú no naces de nuevo de agua y del Espíritu. Cuando nosotros decimos que aquéllos que nacen de nuevo de agua y del Espíritu son los justos, los herejes se oponen a Romanos 3:10, “no hay justo ni aun uno.” Con este verso, ellos etiquetan a estos creyentes como herejes.
Pero ellos son los herejes. El verdadero significado de este versículo no es tan simple como suena. Esos herejes no han leído la Biblia entera. El apóstol Pablo dijo que no hay un solo hombre justo en el mundo. Él estaba citando sólo un verso del Antiguo Testamento que dice que no había nadie justo en el mundo antes que Jesucristo viniera y liberara a toda la humanidad de sus pecados con la salvación de Dios. Así que aquéllos que son salvados por Jesús se han vuelto justos.
Nosotros podemos ver la verdad si leemos el capítulo entero. Los herejes sólo advierten a sus seguidores tener cuidado de aquéllos cuya fe es diferente de la suya. Salvo las iglesias que ellos reconocen como ortodoxas, ellos prohíben a sus seguidores rendir culto en otra parte. Así que sus congregaciones no se atreven a ir a iglesias que predican el evangelio del agua y del Espíritu.
Ellos se vuelven sordos al verdadero evangelio y no pueden nacer de nuevo. Éstas son las enseñanzas de líderes falsos que crían hijos del infierno. Ellos serán juzgados por Dios. Los herejes deben volver a Dios.
¿Quiénes son los herejes? ¿Son los creyentes redimidos en el evangelio del agua y del Espíritu, o son los que claman creer en Jesús pero no en el nuevo nacimiento de agua y del Espíritu?
Tito 3:11 dice que aquéllos que creen en Jesús pero permanecen “condenados por su propio juicio” son herejes.
Ellos les enseñan a sus seguidores a no ir a las reuniones del reavivamiento que en el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu se predica, diciendo que es peligroso. ¿Cómo puede el “ortodoxo” tener miedo de creencias contradictorias? Ellos tienen miedo porque no tienen la verdad de su lado. “Porque mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato” Las enseñanzas de los herejes son así.
Los sacerdotes herejes citan un poco de este libro, un poco de aquel libro, de las palabras de filósofos, de la literatura, y los mezcla con sus propios pensamientos y hacen que todo suene bien.
Ellos guían a sus seguidores para ser ignorantes e intentan educarlos con enseñanzas mundanas. La verdadera iglesia predica la palabra de Dios y educa a los creyentes con la palabra de Dios. Las personas no vienen a la iglesia para ser educadas a la manera del mundo. Más bien, ellos vienen a la iglesia para oír hablar de cosas celestiales que no pueden oírse en el mundo. Ellos vienen a oír la palabra de Jesús.
Las personas entran en su iglesia como pecadores pero quieren salir de la iglesia como creyentes justos que no tienen ningún pecado. ¿Pero qué es lo que los sacerdotes herejes les enseñan? Ellos les dicen a sus seguidores que no vayan a las reuniones del reavivamiento en el que los siervos de Dios predican el verdadero evangelio. Ellos les impiden a sus seguidores el nacer de nuevo del agua y del Espíritu.
Es tan tonto. Ellos pueden engañar a sus seguidores pero ellos nunca pueden engañar a Dios. 
 
¿Pueden los seudo sacerdotes hacer que sus seguidores nazcan de nuevo del agua y del Espíritu?
No. Únicamente los nacidos de nuevo pueden guiar a otros para nacer de nuevo.
 
Herejes, si ustedes son siervos de Dios, ¿No pueden escuchar el reproche del Espíritu hacia ustedes? Ustedes tienen que volverse atrás. Ustedes deben evitar impedir que sus seguidores asistan a reuniones de avivamiento donde los verdaderos siervos de Dios predican el evangelio del nuevo nacimiento del agua y del Espíritu.
Los herejes educan a sus seguidores sólo con la teología, así que cuando ellos encuentran otras teorías, ya están vencidos. Es una verdadera lástima. Los falsos sacerdotes son buenos ministrando sin la palabra de Dios. Ellos predican, consultan, y ministran basados sólo en sus propias convicciones sin ninguna guía. Ésos que ministran y predican sin la palabra de Dios son herejes y asalariados (Juan 10:13).
Los seudo Ministros son herejes porque su ego interior y exterior son diferentes. Algunas personas definen iglesias que no encajan en las denominaciones establecidas como iglesias heréticas. Pero algunas de esas iglesias no quieren pertenecer a cualquier denominación porque la mayoría de las iglesias están lejos de la Biblia.
Los herejes les dicen a sus seguidores que sean redimidos aunque ellos mismos no han resuelto su problema de pecado. Ellos están cometiendo el pecado de Jeroboam. Si hay alguno que todavía tiene el pecado en su corazón pero intenta hacer los trabajos de Dios, él tiene que comprender que sus pecados y la santidad de Dios son absolutamente incompatibles. Él tiene que saber que él es un hereje.
Por consiguiente, si cualquiera que predica o tiene deberes en la iglesia y todavía es un pecador, debe comprender que él es un hereje. Él es un hereje porque él no conoce el evangelio de la salvación de Cristo, el evangelio del nuevo nacimiento del agua y del Espíritu. Si uno aprende la Biblia de un hereje y enseña a otros de la misma manera, él se vuelve un hereje.
Nosotros podemos conocer el árbol por sus frutos. Aquéllos que han sido hechos justos por su fe en el bautismo de Jesús y de su sangre pueden dar a luz justos, mientras que aquéllos que siguen siendo pecadores están condenados a parir pecadores. “Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos” (Mateo 7:17).
 
 
¿QUE ES LO QUE LOS SACERDOTES HEREJES PREDICAN EN SUS SERMONES?
 
¿Qué es lo que los sacerdotes herejes predican en sus sermones?
Teologías mundanas y pensamientos de hombres
 
Los sacerdotes falsos tienen cuidado de esto y de aquello. ¿Por qué tan cuidadosos? Ellos tienen que tener cuidado para que sus mentiras no se descubran porque ellos no tienen la fe legítima del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu.
Los herejes toman un poco de aquí y un poco de allá. Ellos engañan a las personas y enseñan sin saber el verdadero significado del evangelio.
“Porque mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá” (Isaías 28:13).
Línea sobre línea, ellos dicen, “Er, esta palabra significa fulano de tal en griego y fulano de tal en hebreo. Y hay ciertas teorías...” Ellos también advierten a las personas para tener cuidado si ellos encuentran una teoría de salvación expresada en blanco y negro. Ellos dicen, “Martín Lutero dijo esto y Juan Calvino dijo aquello, mientras que Juan Knox dijo cierto, y nosotros pensamos que ellos hicieron que todo sonara en sus propias maneras.”
Ellos ni saben lo que están hablando ni en lo que ellos creen. Aquél que tiene la verdadera fe puede expresar la verdad en blanco y negro. Los verdaderos creyentes pueden decir la diferencia claramente entre el nacido de nuevo y aquéllos que no han nacido de nuevo. Nosotros claramente predicamos el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu.
Pero los herejes están en un caos. Su fe es como un murciélago. Así como un murciélago prefiere estar dentro de la cueva durante el día y en el mundo exterior durante la noche, los herejes gustan de esta teoría y de aquélla. Ellos nunca conocen lo que es la verdad. Cuando un sacerdote hereje va al infierno, sus seguidores lo acompañan hasta el amargo fin. Muchas personas terminan en el infierno porque ellos creen en los profetas falsos.
¿Es su ministro un nacido de nuevo de agua y del Espíritu? ¿Él predica las palabras del evangelio del nuevo nacimiento como está escrito en la Biblia? Si él lo hace, tú eres muy afortunado, y si él no lo hace, tú serás condenado. Si tú no has nacido de nuevo, debes escuchar al evangelio del agua y del Espíritu, debes leer los libros que lo explican, y nacer de nuevo.
Los herejes detestan el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu. Ellos predican, “Jesucristo vino a cubrir nuestros pecados, y él hizo simplemente eso. Él todavía está lavando nuestros pecados hoy y continuará haciéndolo en el futuro.” ¿Cómo puede ser esto verdad? Ellos dicen que ellos son justos pero ellos van derecho a pecar. Ellos son justos en un momento dado y pecadores en otro.
Lo suyo es una falsa teología. Es una imitación. Cualquiera que es ahora justo y es pecador después es un hereje, un falso profeta. Cualquiera que se condena, y quién se corrompe es lo mismo. 
 
 
LA MALDICIÓN DE DIOS ESTÁ EN LOS SEGUIDORES DE LOS HEREJES
 
¿En qué ponen más énfasis los herejes?
En las obras
 
Los herejes no son consistentes. Por consiguiente ellos no pueden guiar a sus seguidores al nuevo nacimiento de agua y del Espíritu cuando sus seguidores van a ellos y les preguntan cómo nacer de nuevo. Ellos más bien, les dan a sus seguidores la idea ridícula de que el hombre puede nacer de nuevo de fantasías y que no se puede ser consciente de cuando se nace de nuevo. Esto es ridículo. 
Jesús dijo en Juan capítulo 3, “el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.” Pero en estos días, a los justos que han nacido de nuevo se les llama herejes presuntuosos.
Los sacerdotes herejes dicen que ellos no pueden llamarse justos porque ellos son humildes. Ellos le dicen a sus seguidores, “no asistas a cualquier reunión del reavivamiento donde el predicador planee hablar de la bendición del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu. Si tú naces de nuevo, tú te volverás un hereje. Y serás denunciado por esta iglesia. Si tú quieres estar con nosotros, quédate pecador, y Dios te hará justo cuando el tiempo llegue.” Esto es lo que ellos dicen. Lo que ellos realmente quieren decir es que depende de ti decidir un nuevo nacimiento o no.
Los herejes les dicen a sus seguidores, “Tú tienes que quedarte con nosotros, pero nacer de nuevo es tu responsabilidad. Así que, tú inténtalo solo. Simplemente quédate como estás ahora, y ve delante de Dios cuando el tiempo llegue, entonces tú averiguarás la verdad. Yo no sé lo que pasará después de eso. Pero ésta es una iglesia verdadera, así que tú tienes que quedarte con nosotros.” ¿Tú piensas que esto es verdad?
Estos sacerdotes herejes toman un poco de aquí y un poco de allá y constituyen una teoría. Entonces se vuelve la única verdad para ellos. Ellos no conocen la palabra de Dios que nos habla sobre el agua y el Espíritu.
Los herejes interpretan la Biblia según sus propios pensamientos. Nosotros tenemos que interpretar la Biblia según las palabras ‘per se,’ pero ellos la interpretan a su propia manera. Es por eso que hay tantos teólogos y denominaciones en el cristianismo.
Debido a que hay tantas denominaciones y teologías heréticas, hay un sinnúmero de libros heréticos. Los falsos sacerdotes citan un poco de este libro y un poco de aquel libro cuando predican. Pero los verdaderos sacerdotes predican exclusivamente de la Biblia.
Los herejes hábilmente arrancan el dinero de sus seguidores de muchas maneras. Ellos comen y viven bien en este mundo y terminan en el infierno porque ellos no nacieron de nuevo. Éste es el fin que Dios ha preparado para ellos.
Dios los soporta al principio. Pero a aquéllos que firmemente se niegan a aceptar la bendición del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu, él los enviará al infierno.
Dios juzgará a los herejes. Los herejes creen muy fervorosamente en Dios y consumen los volúmenes y volúmenes de comentarios de la Biblia y los trabajos teológicos al principio. Pero entonces poco a poco ellos empiezan a predicar mandamientos de hombre, para que sus seguidores nunca obtengan el nuevo nacimiento.
Los herejes ponen más énfasis en sus obras. Cualquier ministro que no predica el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu es un hereje ante Dios.
Ellos presionan a sus seguidores hacia ningún fin. Ellos los coaccionan a asistir a las oraciones de 40-días y toda sus noches, los 100-días de oraciones por la mañana, las oraciones montañesas, el ayuno regularmente, para hacer contribuciones para construir iglesias, mil ofrendas quemadas, las contribuciones para las reuniones del reavivamiento. . . y ellos aun preparan una gráfica para mostrar cuánto ha contribuido cada creyente. Simplemente mirando el fruto de sus obras, nosotros podemos ver que ellos son herejes.
La maldición de Dios cae sobre sus seguidores, también. Los ministros que predican sin haber nacido de nuevo y sus seguidores están todos bajo la maldición de Dios.
 
 
LOS HEREJES INTENTAN LEER LAS MENTES DE SUS SEGUIDORES
 
¿Por qué los herejes tratan de leer la mente de sus seguidores?
Porque ellos no han nacido de nuevo, sino que ministran con hipocresía y sin el Espíritu en sus corazones.
 
Los sacerdotes herejes lloran todos los días. Ellos tienen que estar seguros de agradar a los diáconos mayores y diaconisas, los líderes superiores, los diáconos ordinarios e incluso los hombres comunes. Es cómo ellos lo hacen todos los días.
Ellos se comportan como hipócritas todos los días. “Santo y Misericordioso. . . .” Ellos están llenos de pecado pero tienen que decir cosas santas, para que ellos se vuelvan más hipócritas cada día que pasa.
Un predicador dijo una vez, “es una maldición ministrar sin del Espíritu dentro.” Lo que esto significa es que es herético hacer el trabajo de Dios sin ser redimido; es una vida maldita. Si tú eres uno de estos herejes, tú tienes que nacer de nuevo de agua y del Espíritu.
Cualquiera que cree en Jesús pero no nace de nuevo es un hereje. Y todos tenemos que retroceder al evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu. Sólo el justo quién ha nacido de nuevo de agua y del Espíritu puede predicar el evangelio a otros. 
 
 
LOS HEREJES CLAMAN SOLO POR LA PAZ
 
¿Cómo satisfacen a sus seguidores los sacerdotes herejes?
Ellos siempre claman por la paz, diciendo a sus seguidores que ellos pueden entrar en el reino de los cielos aun siendo pecadores.
 
Isaías 28:14-15 dice, “Por tanto, varones burladores que gobernáis a este pueblo que está en Jerusalén, oíd la palabra de Jehová. Por cuanto habéis dicho: Pacto tenemos hecho con la muerte, e hicimos convenio con el Seol; Cuando pase el turbión del azote, no llegará a nosotros, porque hemos puesto nuestro refugio en la mentira, y en la falsedad nos esconderemos.”
¿Quiénes son los hombres burladores aquí? Ellos son aquellos que predican la palabra de Dios, mezclando en sus propias creencias equivocadas. Cualquiera que sean los pensamientos de un predicador, lo que sea que la teología diga, él tiene que ofrecer una verdadera interpretación de la Biblia. Pero sacerdotes herejes predican la Biblia de la manera que ellos se acomodan. Éstos son los hombres burladores.
“Pacto tenemos hecho con la muerte, e hicimos convenio con el Seol; Cuando pase el turbión del azote, no llegará a nosotros.”
Los herejes dicen que el azote no los atravesará. Ellos les dicen a las personas que no se preocupen. La destrucción y el infierno está esperándolos, pero ellos dicen no se preocupen, la destrucción e infierno no existen para ellos. Así que tú tienes que apartarte de esos herejes si tú deseas vivir.
Los herejes dicen que tú no tienes que nacer de nuevo de agua y del Espíritu. ¿Es verdad? No, absolutamente no. Tú no puedes entrar en el reino de los cielos a menos que tú nazcas de nuevo de agua y del Espíritu.
¿Está bien no entrar en el reino de los cielos? Esto es igual a preguntar si está bien quemarse en el infierno. Innecesario decirlo, la respuesta a ambas preguntas es no. Permitamos que todos crean en el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu y entrar en el reino del cielo juntos.
Los sacerdotes herejes seducen a las personas, diciéndoles que porque ellos creen en Jesús, está bien para ellos seguir siendo pecadores y que ellos no irán al infierno.
¿Jesús toma cuidado de ti aun cuando tú eres un pecador? ¿Un pecador puede ir al cielo? ¿Puedes evitar el infierno aun siendo un pecador? ¿Está escrito en la Biblia que tú no tienes que ir al infierno cuándo tú crees en Jesús, aunque tienes pecado en tu corazón?
Los herejes dicen que ellos han hecho un convenio con la muerte, para que la muerte no venga a ellos. Ellos dicen que un creyente puede evitar ser condenado al infierno aun cuando él tiene pecado en su corazón. ¿Tú realmente piensas que pasa de esta manera?
Los herejes inspiran confianza a las personas, diciendo que la muerte y el infierno no los esperan. Los sacerdotes herejes ponen a aquéllos que no nacen de nuevo como diáconos, superiores, ministros. Pero ellos deben de saber que ellos terminarán en el infierno porque ellos no creen en el evangelio del agua y del Espíritu. Lo que ellos deben hacer es instalar en sus seguidores la creencia en el evangelio del agua y del Espíritu.
¿Son creyentes, aun cuando ellos todavía son pecadores, siguen siendo elegibles para entrar en el cielo? ¿Un pecador puede ir al cielo? ¿Dice la Biblia que los pecadores pueden ir al cielo? No. ¿Puede estar allí un hombre justo con pecado? No. Éstas son las enseñanzas de la herejía y la seudo teología. 
La Biblia dice, “La paga del pecado es la muerte” (Romanos 6:23). Es la ley de Dios. Él envía a todos los pecadores al infierno. Pero todos aquéllos que nacen de nuevo de agua y del Espíritu se les da la bienvenida en el cielo.
“Cuando pase el turbión del azote, no llegará a nosotros, porque hemos puesto nuestro refugio en la mentira, y en la falsedad nos esconderemos.” Los sacerdotes herejes usan palabras para tal efecto y firmemente creen que ellos no irán al infierno aunque tienen el pecado en sus corazones. Porque ellos se están escondiendo detrás de la falsa teología, Dios no puede hacer nada que ayudarlos. Ellos creen exclusivamente en su teología. Porque ellos creen en su teología en lugar de la palabra de Dios, ellos son herejes y pecadores destinados para ir al infierno. Cuán triste es que hay muchos de ellos.
 
 
LOS HEREJES ESTÁN INTERESADOS UNICAMENTE EN EL DINERO
 
¿Cual es la aspiración de los sacerdotes herejes?
Sacarle todo el dinero posible a sus seguidores
 
Los herejes y los falsos sacerdotes sólo están interesados en el dinero. Ellos son codiciosos. “¿Cuánto dinero ofrecerá este hombre si él viene a mi iglesia?” Ellos piensan sobre el diezmo que ese hombre pagará. Esto es como rendir culto a un ternero de oro. “Señor, Por favor permíteme volverme exitoso, permíteme ganar mucho dinero.” Los falsos sacerdotes les enseñan a las personas a orar así.
Ellos dicen, “Si tú crees en Jesús, ganarás mucho dinero, tú concebirás si eres estéril, y tendrás éxito en tu negocio.”
Muchas personas son engañadas por estos falsos sacerdotes, y ellos les arrancan su dinero y van al infierno por sus problemas. ¡Qué injusto es esto! Si alguien que ha estado bajo el hechizo de la herejía recupera el sentido, se sorprenderá de averiguar con cuánto dinero él ha contribuido a sus engañadores. Él se reprochará a sí mismo por su propia tontería siguiendo y trabajando tan duramente para ellos.
Los herejes son especialmente practicantes fervorosos de lo que ellos consideran una religión legítima. Sus seguidores se consagran a las oraciones desde muy temprano en la mañana, las oraciones en las montañas, las contribuciones especiales, diezmos, las ofrendas semanales. Hay tantas razones para tomar el dinero de sus seguidores.
Sus seguidores trabajan duramente, pero ellos todavía tienen el pecado en sus corazones porque nadie les ha enseñado el evangelio del agua y del Espíritu. Algunos les preguntan por él, pero ellos nunca consiguen una respuesta. Cualquiera que no nace de nuevo de agua y del Espíritu es un hereje. 
 
 
LOS HEREJES LASTIMEROS Y SUS SEGUIDORES 
 
¿Quienes son los hombres más dignos de lástima en el mundo?
Aquéllos que ministran sin haber nacido de nuevo del agua y del Espíritu
 
“¡Oh, ustedes herejes lastimeros! ¡Primero trabajen en su redención!” La señal suprema de la seudo fe es rendirle culto a los carneros de oro de Jeroboam. La primera cosa que los herejes del Antiguo Testamento hicieron fue construir un templo y ponerle los carneros de oro (1 Reyes 12:25-33).
Estos días, ellos construyen iglesias grandes y arrancan el dinero de sus seguidores. Ellos le dicen a sus seguidores que reciban préstamos de los bancos para contribuir a la construcción de una gran iglesia. Ellos trabajan las emociones de la congregación y pasan alrededor los platos de la recolección. El dinero, los anillos, los relojes de oros llenan el plato en cualquier tiempo. Los herejes trabajan de esta manera. Es lo mismo en cada una de las iglesias herejes.
Exteriormente ellos parecen estar interesados en las cosas espirituales, pero en realidad ellos sólo están interesados en el dinero. Yo le aconsejo que se aparte de iglesias que sólo se preocupan del dinero. Por favor no vaya a las iglesias dónde sólo el rico se trata cordialmente. Está mal anunciar la cantidad de las ofrendas de cada congregación, ellos lo hacen con la esperanza de atraer más dinero.
Los herejes le dicen palabras tentadoras a sus seguidores.
“Tu serás bendecido si crees en Jesús.”
“Conságrate al trabajo de Dios. Cuanto más tú hagas, más bendecido serás.”
“Si sirves como superior, tú serás bendecido materialmente.”
Así que sus seguidores rivalizan para convertirse en los superiores entre sí. ¿Si no hubiera alguna compensación, quien querría servir como un superior? Y se espera que los superiores financieramente también contribuyan.
¿Ellos son elegidos basados en qué tan profundamente ellos creen en la doctrina de la denominación, cuán prominente ellos están en la sociedad y con cuánto dinero pueden ellos contribuir a la iglesia? Es verdad.
Los herejes sólo se preocupan del dinero. Ellos están interesados en construir grandes iglesias. A ellos no les importa si sus seguidores van al infierno con tal de que ellos ofrezcan mucho dinero.
Los herejes son aquéllos que trabajan por el pan. Ellos atrapan a su gente con títulos fantásticos. Ellos otorgan títulos al azar a sus seguidores (Ezequiel 13:17-19). Esto significa atarlos a la iglesia y aumentar su riqueza. Los herejes no predican el evangelio del agua y del Espíritu. Ellos sólo tratan de enriquecerse.
Incluso alguien que ha asistido a una iglesia durante sólo unos meses puede ser hecho diácono. Es más, si él conoce bien la doctrina y tiene un buen fondo financiero legítimo, él es elevado a superior. Todo esto es una tradición vergonzosa del pecado de Jeroboam que reemplazó a Dios con un ternero de oro.
Los herejes rinden culto a los carneros de oro. Ellos no hacen que su pueblo nazca de nuevo. Ellos sólo toman el dinero de sus seguidores tentándolos con promesas de bendiciones seculares. Ellos no se preocupan si sus seguidores se condenan al infierno con tal de que su iglesia esté firme financieramente.
 
 
HEREREJES DE CONVICCIÓN DÉBIL EN SUS SERMONES
 
A los herejes frecuentemente les gusta decir “probablemente” o “quizá” porque les falta convicción en lo que ellos están diciendo. Ellos no tienen fe en la palabra de Dios y ellos no creen de verdad en lo que ellos predican. Su sistema de creencia no queda dentro de la fe en la palabra de Dios. Ellos dicen, “podría decirse que. . . .” Ellos nunca hablan claramente y con convicción. Sería mejor si ellos no les enseñaran nada a sus seguidores en lugar de enseñarles mentiras.
Los herejes no pueden llevar a las personas al nuevo nacimiento de agua y del Espíritu. Ellos solamente condenan a más personas al infierno. 
 
 
LOS HEREJES JUEGAN EL PAPEL DE FALSOS PROFETAS
 
¿Qué constituye una blasfemia en contra del Espíritu?
Creer en Jesús mientras se vive como un pecador que no cree en su bautismo
 
Mateo capítulo 7 nos habla sobre aquéllos que creen en Jesús y terminan en el infierno. Los herejes protestarán ante Dios en el último día. ¿Cómo está escrito en la Biblia, “Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad’” (Mateo 7:22-23).
Ellos no creen que Jesús lavó todos los pecados del hombre; ellos no creen en el evangelio del agua y del Espíritu.
Ellos practican la maldad. ¿Qué significa esto? Significa que ellos le dicen a las personas que crean en Jesús cuando ellos todavía tienen el pecado en sus corazones. Tú puedes preguntarte ¿y que tiene esto de malo? Pero esto es un pecado serio contra Dios.
Cuando un pecador predica a otras personas la necesidad de creer en Jesús, él no puede llevarlos al nuevo nacimiento porque él mismo no ha nacido de nuevo de agua y del Espíritu. Por consiguiente los herejes sólo producen pecadores que creen en Jesús. Es un pecado contra el Espíritu practicar la maldad.
Los herejes ni creen en la palabra de Dios ni predican el evangelio como está escrito. Ellos sólo arrancan el dinero de sus seguidores. Ellos son pecadores aunque creen en Jesús. Ellos intentan guiar a otros cuando ellos no son nacidos de nuevo. De esta manera, ellos practican la maldad.
 
 
LOS HEREJES SON LA PÁLIDA IMITACIÓN DE LOS JUSTOS
 
¿Cómo distinguimos entre aquéllos que han nacido de nuevo de quienes no?
Podemos distinguirlos verificando si tienen pecado o no.
 
No te dejes engañar por esos predicadores falsos que dicen que ellos son pecadores. No les ofrezcas tu dinero. No les dés tu dinero duramente ganado a esos pecadores.
¿Por qué darle tu dinero a esos predicadores que no pueden ayudarte con tus pecados? Si tú quieres dar tu dinero a una iglesia, por lo menos espera hasta que tus pecados se cubran a través del evangelio del agua y del Espíritu.
Así como hay imitaciones en el arte, hay también imitaciones en la vida. Por ejemplo, hay religiones imitativas que no pueden lavar los pecados del corazón. ¿Cómo puedes tu identificar una religión imitativa? Una imitación es algo que parece genuino en el exterior pero que de hecho está muy lejos de ser algo real.
Tú tienes que decidir por ti mismo. ¿Quiénes son los verdaderos predicadores? ¿Quiénes son los herejes? ¿Cuál es la fe verdadera? La verdadera fe, la ortodoxa cree en Jesús y su poder redentor. Ellos no tienen ningún pecado en sus corazones. Pero los herejes tienen el pecado en sus corazones.
¿Entonces, todas las personas son como estos herejes? Puede ser que sí. Pero vayamos de regreso a la Biblia. Cualquiera que cree en Jesús y no nace de nuevo es un hereje. Está claro que el nacido de nuevo es ortodoxo (verdadero). Entonces, ésos que no nacen de nuevo son herejes. Los herejes son aquéllos que creen en Jesús pero que todavía tienen el pecado en sus corazones.
Los herejes son las imitaciones del justo. Ellos pueden saber que la manera de santificarse es creyendo en Jesús pero desgraciadamente ellos todavía tienen el pecado en sus corazones. Ellos se creen a sí mismos pecadores. Ellos claman que todavía pueden ir al cielo y dicen que ellos rinden culto a Dios. Parece como ellos fueran justos, pero no nos dejemos engañar por las imitaciones. 
 
 

EL JUICIO DE DIOS ESPERA A LOS HEREJES

 
¿Por qué el evangelio puro fue cambiado?
Porque los falsos sacerdotes y los herejes mezclaron las creencias equivocadas de los hombres con el evangelio puro.
 
“Por tanto, dice el Señor, Jehová de los ejércitos, el Fuerte de Israel: Ea, tomaré satisfacción de mis enemigos, me vengaré de mis adversarios; y volveré mi mano contra ti, y limpiaré hasta lo más puro tus escorias, y quitaré toda tu impureza. Restauraré tus jueces como al principio, y tus consejeros como eran antes; entonces te llamarán Ciudad de justicia, Ciudad fiel.
Sion será rescatada con juicio, y los convertidos de ella con justicia. Pero los rebeldes y pecadores a una serán quebrantados, y los que dejan a Jehová serán consumidos. Entonces os avergonzarán las encinas que amasteis, y os afrentarán los huertos que escogisteis. Porque seréis como encina a la que se le cae la hoja, y como huerto al que le faltan las aguas. Y el fuerte será como estopa, y lo que hizo como centella; y ambos serán encendidos juntamente, y no habrá quien apague” (Isaías 1:24-31).
 Dios nos dice que si nosotros creemos en el hombre, seremos avergonzados a causa del hombre. Él nos dice que seremos avergonzados debido a la iglesia que nosotros hemos escogido para nosotros, y esta vergüenza estará como un árbol cuyas hojas se marchitan, como un jardín que no tiene agua.
Él nos dice esos sacerdotes falsos y sus seguidores que creen en los mandamientos de hombre en lugar de la palabra de Dios se volverá estopa y sus obras chispas. Los dos arderán en el infierno. Los predicadores falsos y herejes que no han sido redimidos así como los pecadores y enemigos del justo se juzgará con la llama de Dios.
Iglesias construidas sólo sobre la teología pueden parecer grandiosas por fuera, pero no hay nada dentro. Cualquier iglesia que no se funda en la fe de la palabra de Dios y el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu es como un jardín que no tiene agua.
Puede ser un árbol, pero es un árbol muerto incapaz de llevar fruto. Cuando un bien no tenga agua, no será nunca más un largo bien.
“Y el fuerte será como estopa, y lo que hizo como centella; y ambos serán encendidos juntamente, y no habrá quien apague.” Aquéllos que no tienen el Espíritu pueden parecer fuertes a otros hombres, pero a los ojos de Dios, ellos están como la estopa en el límite de los fuegos del infierno.
¿El Señor pregunta, “Guarda, ¿qué de la noche?” (Isaías 21:11) el justo quién tiene la vida eterna debe predicar el evangelio del agua y del Espíritu en la oscuridad de la noche.
Dios es luz y satanás la oscuridad. Dios lleva a las personas a la rectitud y satanás lleva a las personas a los templos falsos con el caos y falsa teología.
 En el tiempo del profeta Isaías, la fe de las personas era tan caótica como ahora. Ellos confundían la palabra de Dios con las teologías y mandamientos de hombre. Ellos guiaron mal al pueblo de Israel con los productos caóticos del hombre tanto que Dios decidió librarse de ellos todos.
 “Restauraré tus jueces como al principio, y tus consejeros como eran antes” Las ofrendas que nunca se aceptarán por Dios son como la aleación, una mezcla de la verdad de Dios y las teorías del hombre.
Dios nunca acepta ofrendas que son mixtas. Ellos pueden parecer puros al ojo humano, pero si están mezclados con las creencias equivocadas de hombre, ellos están mezclados con las impurezas y así no son aceptables a Dios.
Dios reprendió al pueblo de Israel, sobre todo a los herejes, a los seudo-predicadores y a los pecadores.
Si nosotros leyéramos Éxodo o Números, podríamos ver que Dios no los reprendió al principio. Dios ayudó al pueblo de Israel y derramó bendiciones sobre ellos. Pero después de la muerte de Josué, de Jueces, el pueblo de Israel fue invadido.
Sin embargo, ellos escogieron ir en su propia manera. En ese momento, Dios les envió al profeta Jeremías y le dijo a Israel que se rindiera a Babilonia.
Jeremías les dijo al pueblo que se rindieran a Babilonia. Esto tiene un significado espiritual, simbolizando el hecho de que el justo dice aquéllos que siguen a los herejes que se rindan al evangelio del agua y del Espíritu. 
 
 
DIOS REPRUEBA A LOS HEREJES
 
¿Por qué Dios reprueba a los herejes?
Porque sirven a ídolos en lugar de Dios.
 
¿Por qué hizo a los siervos de Dios reprender al pueblo de Israel? Porque ellos cambiaron el sistema sacrificatorio, designaron personas ordinarias para ser sacerdotes, y cambiaron las fechas de los sacrificios.
Ellos cambiaron el Día de la Expiación del décimo día del séptimo mes al quinto día del octavo mes y designaron sacerdotes de fuera de los Levitas. Ellos así bloquearon el camino al nuevo nacimiento.
Dios reprendió a los falsos predicadores. Ésos que sirvieron a los carneros de oro en lugar de Dios se hicieron sacerdotes herejes.
De hecho, Dios no los reprendió sólo por adorar ídolos. ¿Tú y yo a veces no hemos rendido culto a ídolos, también? Nosotros a menudo pecamos, pero no se considera que nuestras iniquidades sean pecados graves únicamente porque estamos bajo la gracia de Dios. Pero reemplazar a Dios por los carneros de oro, no puede ser perdonado. Y lo mismo es por cambiar el sistema sacrificatorio y poner personas ordinarias en el sacerdocio.
¡Qué terribles pecados son éstos! Estos son los más graves pecados. ¡Cómo puede uno ser perdonado por intercambiar a Dios por los carneros de oro! Está escrito en la Biblia que fue el pecado de Jeroboam el que trajo la ira de Dios.
Así como Dios mostró su ira en el Antiguo Testamento, él ahora destruye a los pecadores que están en contra de ´el. Dios le dijo a Israel que maldeciría a aquéllos que no se volvieron atrás en la adoración a los carneros de oro.
 
 
LOS HEREJES OFRECEN SACRIFICIOS DE MALDAD
 
¿Qué debemos hacer antes de servir a Dios?
Haber sido lavados de todos nuestros pecados.
 
Los reyes y sacerdotes herejes de Israel estaban contra Dios y ellos designaron al sacerdocio a aquéllos que desatendieron el sistema sacrificatorio. Jeroboam, el rey con una mente torcida, ordenó a alguien que no era de la tribu de Leví como un sacerdote.
 Sólo aquéllos que eran de la casa de Leví podrían hacerse sacerdotes y podrían trabajar en el tabernáculo. Para más precisión, los sacerdotes tenían que ser de la casa de Aarón. Ésta era la ley eterna de Dios. Pero Jeroboam ordenó sacerdotes de fuera de la tribu de Leví y les hizo ofrecer sacrificios a los carneros de oro. Nosotros debemos saber cómo esto trajo la ira de Dios.
Incluso hoy, aquéllos que no nacen de nuevo pueden volverse ministros, líderes, y diáconos en la iglesia. Esto va contra la ley de Dios e invita a su ira. ¿Dios se agrada con los sacrificios de maldad? Los herejes tienen que destruir sus carneros de oro, volverse a Dios y nacer de nuevo.
 Isaías 1:10-17 dice, “Llamamiento al arrepentimiento verdadero Príncipes de Sodoma, oíd la palabra de Jehová; Escuchad la ley de nuestro Dios, pueblo de Gomorra. ¿Para qué me sirve, dice Jehová, la multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos. ¿Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros delante de mí para hollar mis atrios? No me traigáis más vana ofrenda; El incienso me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; Son iniquidad vuestras fiestas solemnes. Vuestras lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas mi alma; me son gravosas; cansado estoy de soportarlas. Cuando extendáis vuestras manos, yo esconderé de vosotros mis ojos; Asimismo cuando multipliquéis la oración, yo no oiré; llenas están de sangre vuestras manos. Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo; aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda.”
Si nosotros leyéramos este pasaje cuidadosamente, podremos ver que los líderes religiosos de Israel eran muy devotos. Pero a pesar de su devoción, ellos fueron destruidos porque ofrecieron los sacrificios incorrectos y desobedecieron la ley de Dios.
Nosotros podemos ver que ellos ni siguieron la ley de Dios cuando ofrecieron los sacrificios ni consideraron la palabra de Dios. Estos líderes eran tan consagrados que ellos hicieron innumerables ofrendas ante Dios. La Biblia dice que la sangre fluyó como río dentro del tabernáculo.
Pero cuando Dios miraba lo que ellos hicieron, les dijo que eso era como el pecado de Gomorra. Él vio que ellos estaban haciendo las ofrendas ante él, pero de hecho, ellos estaban pecando. Él les dijo que era mejor no traer ofrendas en absoluto. Él no las quería.
Como ellos ofrecieron sacrificios ante los carneros de oro, Dios no podría perdonar sus pecados. Él no podía aceptarlo más. Él les dijo que debían ofrecer los sacrificios según la manera que él ordenó. Si no, era mejor para ellos no ofrecer sacrificios en absoluto.
Sus sacrificios no se ofrecieron a Dios de la manera correcta, y como resultado, los sacerdotes pecaron contra Dios. Tú debes saber que servir Dios y hacer su trabajo sin haber sido lavado de tus pecados es un grave pecado ante él.
 
 
LOS HEREJES SON COMO MAESTROS DE ESCUELA
 
¿Qué es lo que enseñan los herejes?
Enseñan ética, no cómo nacer de nuevo.
 
Los herejes exteriormente parecen santos. Cuando ellos ocupan el púlpito, parecen tan impresionantes que muchos se engañan por su apariencia. Ellos suenan muy lógicos. Y siempre concluyen sus sermones amonestando a las personas para que sean buenas. ¿Qué tipo de sermón es ése? ¿Cuál es la diferencia entre sus sermones y las lecciones de los maestros escolares?
La iglesia de Dios es el lugar dónde los nacidos de nuevo vienen juntos a rendir culto a Dios. Sólo este tipo de iglesia es una verdadera iglesia. La verdadera iglesia de Dios no intenta enseñar cómo comportarse ante Dios. El predicador de la verdadera iglesia predica el evangelio del agua y del Espíritu. No importa cuan débil tú eres, Dios lavó todos sus pecados.
Los predicadores herejes les dicen a sus seguidores, “Haga esto, y haga aquello,” poniéndoles cargas pesadas, pero ellos mismos no están dispuestos a alzar un dedo para moverlos.
Un predicador hereje le compra un violín caro a su niño y lo envía al extranjero para que estudie. ¿Cómo puede un sacerdote permitirse el lujo de hacer eso? ¿De dónde consigue el dinero? ¿Si él tiene ese tipo de dinero, no debería gastarlo en predicar el evangelio? ¿Un predicador debe manejar un automóvil caro? ¿Él tiene que montar en un automóvil de lujo para ser dignificado? Un predicador que maneja un automóvil caro es un ladrón. ¿Cuándo sus seguidores no pueden ni siquiera permitirse el lujo de comprar un automóvil compacto, cómo puede ser correcto que él tenga un modelo lujoso? Nosotros podemos detectar a un predicador hereje sólo por mirar sus hechos.
Los predicadores herejes piden sumas grandes de dinero. Algunas iglesias les pagan arriba de $10,000 a sus predicadores por mes. Y ésta es sólo la paga oficial. Además les proporcionan cuotas educativas, cuotas para los libros, las cuotas para el cuidado del niño, cuotas para la visitación, sólo por nombrar algunas.
Y todavía, algunos de ellos se quejan de que no se les paga lo suficiente. Ellos obtienen $10,000 por mes y piden más dinero. ¿Son $10,000 para comprar un pollo? Un predicador debe estar contento con ganar simplemente lo suficiente para sobrevivir cuando él predica el evangelio del agua y del Espíritu.
Un verdadero predicador toma el consuelo y paz de Dios. Pero un predicador hereje que no tiene ninguna paz pide la compensación monetaria. Tales predicadores son de hecho los adoradores de los carneros de oro.
La iglesia de Dios a veces se llama Sión. No hay ninguna iglesia tan bonita como Sión. La iglesia de Dios es el lugar dónde el evangelio del agua y del Espíritu se predica.
Isaías 1: 21 dicen, “¡Cómo te has convertido en ramera, oh ciudad fiel! Llena estuvo de justicia, en ella habitó la equidad; pero ahora, los homicidas.” Isaías describe la iglesia de Dios, diciendo, “estuvo llena de justicia.”
 Dios simplemente es justo. Porque nosotros estamos incompletos, porque somos descendientes de Adán y nacimos para pecar, Jesús vino a este mundo para lavar nuestros pecados con el agua y el Espíritu. Así es cómo es Dios de justo.
En el Antiguo Testamento, cuando las personas se dieron cuenta que eran insuficientes, ellos vinieron a Dios y ofrecieron sacrificios. “Yo hice mal en esta y en esta manera. Yo estaba mal.” Entonces ellos fueron perdonados de sus pecados diarios, y también pudieron obtener el perdón por los pecados del año una vez desde el Día de Expiación.
De la misma manera, en el Nuevo Testamento, Jesucristo vino a este mundo y se bautizó y fue crucificado para lavar los pecados de la humanidad de una vez por todas.
Pero en el Servicio de Año Nuevo, muchas personas lloran y se arrepienten, “Dios mío, por favor perdóname por los pecados que yo comprometí el año pasado. Y por favor bendíceme en el nuevo año.” Esas personas son herejes.
¿Entonces, cual es la verdad del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu? Jesús vino hace aproximadamente 2000 años al mundo, lavó de una vez por todas los pecados de la humanidad salvándonos para siempre del pecado. Él nos salvó de todos los pecados del mundo con el agua y la sangre. ¿Pero si nosotros pidiéramos perdón todos los días, que diría Él?
“¡Cómo te has convertido en ramera, oh ciudad fiel! Llena estuvo de justicia, en ella habitó la equidad; pero ahora, los homicidas.” Cualquiera que se llama a sí mismo pecador es un hereje.
 
 
LOS SACERDOTES HEREJES NO PUEDEN PREDICAR EL EVANGELIO DEL NUEVO NACIMIENTO DEL AGUA Y DEL ESPÍRITU
 
¿Escucha Dios la oración de los pecadores?
No. Él no puede escucharlos porque sus pecados los separan de Dios.
 
Nuestro Dios llama a aquéllos que creen en Él y que piden perdón por sus crímenes. Desde que ellos piden perdón y también se dicen pecadores, ¿Esperan ellos que Jesús vuelva y muera por sus pecados por segunda vez? El bautismo y la cruz de Jesús son la realidad de la salvación.
En 1 Pedro 3:21, dice que el bautismo de Jesús es el tipo de nuestra salvación. Jesucristo murió para salvar a la humanidad del pecado una vez. Él lavó de una vez por todas los pecados de la humanidad y resucitó tres días después. Él se sienta ahora a la diestra de Dios.
Jesucristo fue bautizado una vez y murió una vez en la cruz para salvarnos para siempre del pecado. Él fue bautizado por Juan Bautista cuando él tenía 30 años. Él murió para salvarnos de todos los pecados del mundo una sola vez. ¿No significa esto que el juicio fue celebrado para todo el tiempo?
Si los herejes dicen que ellos todavía son pecadores, ellos están pidiéndole que baje una segunda vez y sea crucificado de nuevo. De hecho, Él tendría que seguir haciendo esto cada vez ellos piden perdón.
Aquéllos que creen en el evangelio del agua y del Espíritu en sus corazones se salvan para siempre del pecado, han sido hechos justos, van al cielo para recibir las bendiciones de Dios y la vida eterna. Quienquiera conocer la justicia puede salvarse a través del agua y del Espíritu y puede llegar a ser una de las personas bendecidas por Dios. Cualquiera que pide la justa salvación ante Dios será bendecido.
Permítanos leer Isaías 1:18-20. “Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: Si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; Si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra; si no quisiereis y fuereis rebeldes, seréis consumidos a espada; porque la boca de Jehová lo ha dicho.”
 Dios está diciéndonos que si nosotros somos obedientes al evangelio del agua y del Espíritu, nosotros comeremos lo bueno de la tierra, pero si nosotros nos negamos a ello y nos rebelamos, seremos devorados por la espada.
Nuestro Dios dijo, “Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta:" ¿Tú eres insuficiente? ¿Tú eres injusto? ¿Tú te amas a ti mismo demasiado? ¿Tú no puedes vivir los mandamientos? ¿Puedes hacer lo que la ley te dicta? ¿Tú sabes pero no puedes practicar? Entonces, venga a mí. Si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; Si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana” Esto significa que Dios salvó a los pecadores justamente y los hizo justos.
No había ningún pecado cuando Dios creó Adán y Eva. Pero satanás vino a escena muy pronto. Él los tentó para desobedecer a Dios e hizo todos los pecados de la humanidad haciéndolos pecar. satanás causó la caída de hombre. Al principio, Adán y Eva no eran pecadores ante Dios. Ellos vivieron con Dios en el jardín del Edén. Pero se volvieron pecadores. Así ahora, Dios está llamándonos. Venga y pongámonos a cuenta. ¡Pongámonos a cuenta!
“¿Cuánto pecado has cometido en este mundo? ¿Y cuánto pecado cometerás antes de morir?”
“Oh, Dios. Es imposible no pecar. Nosotros no podemos santificarnos no importa cuan duro lo intentamos.”
“Bien, ¿cuánto pecado tú has cometido hasta ahora entonces?”
“Bien, Señor, yo no puedo recordar todo, pero hay unos que se han quedado en mi mente. ¿Tú recuerdas aquella vez? Tú sabes de lo que estoy hablando. . . y aquella otra vez, Tú sabes. . . ”
Entonces Dios dice, “Adelante, dime. ¿Piensas que eso es todo? ¿Tú sabes cuántas veces además de aquéllos? Pero todos los pecados que tú recuerdas, todos los pecados que tú has olvidado, e incluso todos los pecados que tú cometerás en el futuro, Yo los lavé para siempre, todos ellos. Y no sólo los tuyos, sino los de tus hijos y los de sus hijos, y a todos los pecados de sus descendientes.’ Yo soy el Dios justo. Yo lavé sus pecados una vez para siempre.”
Dios quien lavó todos los pecados de la humanidad, desde el pecado de Adán hasta los pecados del último hombre en la tierra, es el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin.
“Yo soy el Salvador y Omnipotente Dios.”
“Yo soy Jehová, el Dios Misericordioso.”
“Yo tendré misericordia de aquéllos que merecen la misericordia, y yo tendré compasión de aquéllos que bien merecen la compasión.”
Si nosotros pedimos su misericordia y somos francos con Él, nosotros podemos obtener la compasión de Dios. Nuestro Padre quiere bendecirnos a todos nosotros. Él quiere que todos nos volvamos justos. En Su amor y compasión, Él quiere hacernos sus hijos justos a todos nosotros.
 
¿Qué quiere Dios que hagamos después de nacer de nuevo?
Él quiere que prediquemos el evangelio a todo el mundo
 
Él quiere que nosotros seamos emblanquecidos como la nieve. Jesús lavó los pecados de la humanidad de una vez por todas a través de su bautismo y su sangre. Si una iglesia no puede resolver los problemas del pecado y vida de todos los creyentes, no puede llamarse la verdadera iglesia de Dios.
Las personas vienen a sacerdotes y preguntan, “yo tengo pecado. ¿Qué debo hacer? Yo me arrepiento y me he arrepentido tantas veces, pero mis pecados no se van. Yo no puedo seguir más. Yo no creo que pueda continuar con mi vida religiosa.” Si un sacerdote no puede darle la respuesta correcta a sus problemas, él es un hereje. Él puede decir, “depende de usted. Vaya a orar en las montañas. Pruebe un ayuno de 40días.”
Los sacerdotes herejes o los líderes religiosos están tan llenos de impurezas que ellos ni siquiera conocen el evangelio del agua y del Espíritu. Ellos no saben si sus almas terminarán en infierno o en el cielo.
Esos líderes no están bien ante Dios. Ellos son seudos y herejes. Ellos parecen como si creyeran en Jesús del exterior, pero sus corazones todavía están llenos de pecado. Ellos no han sido lavados de sus pecados. Ellos no pueden predicar el evangelio del agua y del Espíritu que puede lavar todos los pecados. No nos dejemos engañar por ellos.
En Tito 3:10-11 se dice de los herejes, “Al hombre que cause divisiones, después de una y otra amonestación deséchalo, sabiendo que el tal se ha pervertido, y peca y está condenado por su propio juicio.” Porque ellos creen en Jesús pero no nacen de nuevo, ellos se condenan como pecadores. Ellos ignoran y pisotean el evangelio del agua y del Espíritu, diciendo que ellos son pecadores que no pueden pero van al infierno.
Ellos son los herejes en la cristiandad. Cualquiera que cree en Jesús y tiene pecado es un hereje. Los herejes difieren de Dios. Dios es santo. Pero ellos no son santos. Aquellos que creen en el evangelio del agua y del Espíritu se limpian de todos sus pecados. Así que cualquiera que cree en Jesús pero tiene pecado es un hereje. Nosotros tenemos que apartarnos de aquéllos que dicen que creen en Dios pero que todavía son pecadores.
Permítenos predicar el evangelio a aquéllos que no lo han oído todavía y a aquéllos que quieren creer pero no pueden porque no lo conocen. Permítanos ayudarles a nacer de nuevo. Permítanos rechazar a aquéllos que estorban en el camino del evangelio del agua y del Espíritu.
Nosotros debemos predicar el evangelio del nuevo nacimiento de agua y del Espíritu por todo el mundo. ¡Amén!
 
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REGRESA AL EVANGELIO DEL AGUA Y DEL ESPÍRITU